Una serie: Under the Banner of Heaven
Cuando yo daba cursos de crónica siempre hablaba de Jon Krakauer, un montañista que se puso a escribir crónicas para financiar sus expediciones y terminó convirtiéndose en un extraordinario autor de no-ficción, con libros como Into the Wild e Into Thin Air. Krakauer es un obsesivo investigador de obsesiones ajenas, o más bien de los extremos a los que una convicción innegociable (como vivir en la naturaleza o ascender el Everest) te puede conducir.
La miniserie Under the Banner of Heaven es una adaptación extraordinaria de otra historia que investigó a fondo para publicar un libro, con ese mismo nombre. Si te interesa el true crime, las historias reales de crímenes, o simplemente una historia muy bien contada, esto es para ti.
En 1984, cuando una joven madre y su hija pequeña fueron asesinadas en el seno de una comunidad mormona en Utah, un detective que como mucha gente en esa región desértica de EEUU profesa esa misma religión (y su compañero indígena, un personaje muy importante para la trama) empieza a investigar, absolutamente abrumado por el horror del crimen y por lo que irá encontrando. Su pesquisa lo llevará a poner a prueba su propia fe, y a ser cuestionado por otros feligreses, porque la interpretación de los preceptos de la Iglesia de los Santos de los Últimos Días es el núcleo del asunto.
No es una denuncia de esa iglesia en su conjunto, sino de los extremos del fanatismo, no solo allí sino en todos los aspectos en que se está manifestando en ese país. El libro salió hace casi veinte años, pero esta serie, que FX estrenó en 2022, aparece ahora como un certero comentario acerca de cómo ciertas ideas sobre la libertad que vienen del siglo XIX están sirviendo de excusa para cometer atrocidades en el siglo XXI.
Una película: Las leyes de la frontera
Hay muchas bildungsroman y películas que siguen el modelo, pero no todas tienen una gran banda sonora de rock andaluz de los 70 ni se basan en un libro de mi admirado Javier Cercas, de quien les hablé en otro despacho. Oculta en el catálogo de la Netflix norteamericana con el título de Outlaws, el largometraje español Las leyes de la frontera (dirigida por Daniel Monzón en 2021) es impecable en todos los aspectos y creo que merece conocerse más.
Un adolescente de Girona al que maltratan sus compañeros encuentra un arcade donde pasar el tiempo y ganarse unas pesetas ayudando, y allí conoce a Tere y a Zarco, dos jóvenes delincuentes de los barrios de inmigrantes del sur que le ofrecen, naturalmente a cambio de un precio bien alto, lo que “el gafitas” no tiene en ningún otro lado: que lo escuchen, que lo respeten, y hasta que lo quieran.
Esto no va solo de ritos de paso e iniciación sexual, sino de muchos otros umbrales: entre los nativos y los extraños, entre los que se consideran decentes y los que se tachan de indeseables, entre los que hablan catalán y los que no, entre los pillos que se ufanan de seguir las normas y los malandros fieles a un código de ética.
Un libro: The Sorrows of an American, de Siri Hutsvedt
Tenía tiempo queriendo conocer la literatura de esta ensayista y narradora estadounidense y ahora llegó a mis manos esta novela, que en la traducción española fue titulada Elegía para un americano. Ahora quiero leer mucho más de ella.
Hutsvedt usa la vida de su padre muerto y de algunos parientes ya desaparecidos en esa plana, remota y helada Minnesota que recibió mucha inmigración escandinava como punto de partida para una novela de ficción sobre cómo lidiamos con el trauma para convertir fantasmas en ancestros, misterios en conocimiento, y pesadillas en memoria. Un psiquiatra psicoanalista que acaba de divorciarse encara el miedo a la soledad definitiva mientras debe ayudar a su hermana viuda a lidiar con el complicado legado de su famoso marido escritor y el daño que el 11 de Septiembre dejó en su hija adolescente. Ambos hermanos inician además el luto por la muerte del padre, que les dejó un enigma que resolver en la forma de una historia terrible que no ha sido bien contada y que hay que distinguir de los malos recuerdos de la Gran Depresión y de la Segunda Guerra Mundial. Muchos otros personajes revelan distintos modos de lidiar con el trauma oculto: la psicosis, la mitología, el suicidio, la renuncia al mundo o hasta la conversión de eso en un performance y una colección de fotos que vender en una galería.
Un álbum: The New Four Seasons
Los clásicos son para volver siempre a ellos, y también para darles la vuelta. Todos hemos escuchado miles veces Las cuatro estaciones de Antonio Vivaldi y hasta en versiones con instrumentos totalmente ajenos a la Venecia del Barroco. Pero las posibilidades de este concierto para orquesta de cámara no se han agotado todavía. Hace diez años el compositor británico Max Richter estrenó una versión muy personal de Las cuatro estaciones, y ahora convocó al ensamble europeo Chineke! y a la violinista Elena Urioste como solista para una nueva grabación de este trabajo con el sello Deutsche Gramophon. Vamos a ver qué te parece; para mí, es un gran ejemplo de negociación con la herencia cultural universal, a la que hay que acercarse con veneración pero también con confianza en que se puede crear algo nuevo.
Una artista: Sharon Sprung
Hablando de negociaciones, esta pintora nacida en 1953 y educada en Nueva York dice que sus retratos son producto de una “negociación cuidadosamente observada”. Es suyo el retrato oficial de Michelle Obama que acaba de develarse - junto al de su esposo, hecho por otro artista - en la Casa Blanca, ahora que ésta no está bajo el control de un mandatario que no aceptó tener a los Obama en las paredes, como corresponde por tradición con cada presidente de EEUU.
Los retratos de Sharon Sprung exhiben precisión formal pero también una cosa medio desafiante, medio punk. Será porque ella declara tener entre sus principales influencias tanto a Caravaggio como a Schiele. Solo eso ya la convertía en una artista a considerar para el retrato de una mujer como Michelle Obama, encargo gracias al cual uno puede conocer el resto de su obra y enfrentarse al ¿problema? de decidir cuál de sus retratos te gusta más.
Un podcast: Sonic Symbolism
La incomparable Björk está por sacar un nuevo álbum y, aparte de lanzar dos singles, tiene un podcast en el que con algunos de sus panas islandeses y personajes como Brain Eno cuenta cómo hizo cada uno de sus discos, comenzando por Debut. Por supuesto que es una maravilla, porque en cada conversación ella cuenta cómo era su sensibilidad de entonces y cómo eventos de su vida, como llegar a Londres con su chamo de ocho años e intimidada por la complejidad de la metrópolis, la fueron convirtiendo en la artista que conocemos, alguien que nunca se conforma, que no deja de buscar caminos nuevos, y que hace las cosas como le parece, de un modo en que no se asemeja a nadie más.
Björk habla de sus aventuras en los clubes de tecno, de que detesta el 90% del jazz pero venera el 10% restante, o de lo que leía, lo que veía, lo que soñaba en sus distintas etapas. Un momento particularmente conmovedor es cuando ella cuenta, con toda naturalidad, que empezó a cantar cuando debía irse caminando sola a la escuela, muy chiquita, entre los volcanes y los ventarrones de Islandia.
Aprovecho de lanzar aquí también mi fan theory, mi nueva hipótesis demencial sobre el orden del cosmos: al sacar el 6 de septiembre lo que podríamos convenir en describir como un reguetón, Björk torció el espaciotiempo y empezaron a pasar cosas increíbles: dos días después murió la reina Elizabeth II, las fuerzas ucranianas humillaron al invasor ruso con un contraataque, y Flea, de Red Hot Chili Peppers, dijo que su disco favorito de 2022 es Motomami, de la Rosalía. Dime tú si esperabas que Björk iba a hacer esto:
Un autor: Hervé Tullet
Los libros de arte para niños son cada vez más y llega un punto en el que entre tanta oferta, uno se pierde. Pero hay obras y autores que conviene buscar y tener en la biblioteca. No sólo porque son estupendos, sino porque son libros que, después que los niños crezcan y tengan otros intereses, podrán quedarse en casa y pasar a la mesa de centro de la sala, como cualquier coffee table book de esos a los que uno les toma especial afecto.
Y uno de esos autores es Hervé Tullet. Este artista visual francés (Avranches, 1958) ha dedicado casi tres décadas de su trabajo a los niños, con unos resultados que son cada vez más notorios. En 1998, su libro Faut pas confondre (No confundamos) ganó el Premio de No Ficción en la Feria de Bologna, pero sin duda es Un libro, editado en español por Kókinos (2018), el título que ha conquistado a la audiencia internacional. Se trata de un ejercicio en el que los colores primarios y el libro como objeto se convierten en instrumentos para la creatividad infantil y que los niños (y los adultos) no se cansan de leer y releer. Como sucede con todo su trabajo, vale decir.
Tullet ha creado también una iniciativa divina para los niños en todo el mundo, que se titula La Expo Ideal, en la que cualquier persona puede participar creando su propia exhibición museística en casa. Uno de esos autores que nos invitan a soñar y a jugar y que nos recuerdan que no nos hace falta demasiado para hacerlo posible.
Cynthia Rodríguez es la fundadora de UpaUpa, una web para la preservación de nuestra lengua y la promoción de la lectura en la infancia.